Día 20 Expedición del Alma

Día 5 – Integrando a mi Mamá

En el andar de nuestra vida, hemos tenido heridas. Ahora como adulto podemos darle nombre, revivirlas para ir a la memoria del dolor y poder sanarla. Sin duda alguna nuestra madre también tuvo sus heridas, a lo mejor sus padres no pudieron darle lo que ella necesitaba y ese vacío la llevo hasta este presente, ahora como madre. Los modelos de maternaje que ella ha recibido de su propia madre o del propio sistema cultural y religioso donde se ha educado que no siempre han sido modelos sanos han podido hacer que ella también este desconectada del fluir del amor incondicional energético, el niño no puede comprender la humanidad de la mamá, solo experimenta estas carencias.

En nuestro camino de sanación no podemos continuar responsabilizando a la madre de todas nuestras carencias y problemas, como adultos tenemos la posibilidad de sanarnos, dejar de esperar aquello que la madre no pudo darnos, aceptar todos y cada uno de nuestros sentimientos contradictorios hacia ella, incluido el profundo dolor de desconexión con su amor

La clave por lo tanto en relación a sanar el vínculo con la madre, es tomar nuestra responsabilidad como adultos en la sanación de este vínculo, dejar de esperar que la madre o cualquier otra persona, satisfaga las carencias que de niños o niñas hemos tenido, tomar estas carencias en nuestro corazón y recuperar el poder que todos tenemos dentro de sanarnos, amarnos y respetarnos llevando al mundo y a nuestras relaciones presentes esta sanación.

Espero que durante estos 4 días hayas sanado este vínculo.

¿Qué crees tú que todavía te falta?

Quizás, trabajar la edad de la adolescencia, donde se intensifican los problemas con relación con mama.

Donde nos sentimos que somos los dueños del mundo y que nos imponen limites que no entendemos y no aceptamos.

En este día, integraremos a ese adolescente en esta actividad del perdón.

Actividad:

Imagínate en la edad donde comenzaste tu proceso de desarrollo, tanto como niña como niño.

¿Cuáles eran los pensamientos que tenías?

¿Como era la relación con tu mama en esta época?

¿Qué era lo que más te molestaba de ella?

¿Que sientes que era necesario que te diera y no te dio?

Pudiera ser que te daba mucha libertad y tu hoy pienses que, si hubiera sido un poco más exigente contigo, no te habría pasado x cosa.

O por ser tan exigente, no pudiste hacer x cosa.

En fin, has una carta desde la energía del adolescente, pero sin perder de vista que hoy eres un adulto.

Se honesto(a) contigo mismo(a) y desde esa honestidad, escribe a tu mama.

Esa carta la vas a quemar luego y vas a comprar una mata bonita, y dentro de la tierra vas a colocar las cenizas.

Si tu mama está viva y la vas a visitar, se le llevas de Regalo, junto con la Piedra, que te invito a que la pintes pensando en todo lo que has podido sanar.

Si tu mama no está viva o no está cerca, igual compras una mata bien bonita y se la regalas junto con la piedra a alguna persona que para ti se haya portado como una madre.

Ahora incorpora a tu mama en el dibujo de la familia y diseña tu Mandala, conectado(a) con tu madre. Sintiendo tu chacra sexual una flor de 6 pétalos de tonos rojo, amarillos y naranja.

Meditación

Ubica tu Espacio Sagrado.

Respira lento y profundo haciendo consciencia de los latidos del corazón.

Siente como tu corazón inhala y exhala, inhalando todo el amor que hay dentro de ti, y exhala todo ese amor hacia tu familia.

Ahora visualiza a tu mama frente a ti. Imagínate que eres un adolescente.

Desde esa edad que quizás fue un poco difícil, imagínate conversando con tu mama. Que le dirías, que le reprochas, y que le agradeces.

Observa esa conversación.

Es como si estuvieras viendo una película donde tu como adolescente hablas con tu mama, le dices todo lo que sientes, sin agresión solo como una oportunidad de sacar de ti el dolor que ha guardado durante tanto tiempo.

Y como espectador, ahora como adulto, observa hasta qué punto realmente fueron heridas, observa que hace tu mama, obsérvate que haces como adolescente.

Ahora imagina que puedes entrar a la pantalla, y te encuentras tu como adulto, tu como adolescente y tu mama.

¿Qué le dirías ahora como adulto, al recordar todos esos episodios?

Y dale la oportunidad a tu mama de expresarse.

Observa como desde tu corazón sale una luz blanca brillante que los abraza, de cada uno sale esta luz y de cada uno se abrazan, formando un tejido maravilloso, donde observas que la flor de la vida se va tejiendo con esa luz blanca que sale del corazón de todos.

Siente como esa energía sagrada los sana desde el amor universal.

Cuando sientas que deseas salir del espacio sagrado, simplemente abres tus ojos sintiendo la alegría en tu corazón de haber sanado desde el perdón y el amor tu relación con tu mama.

Pensamiento:

El corazón de una madre es un abismo profundo en cuyo

 fondo siempre encontrarás el perdón."

(Honoré de Balzac)

Afirmación:

Ya estoy en Paz Mamá, ahora te integro en mi corazón

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Mercedes H Navas RL

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