Día 23 Expedición del Alma

Día 3. Miro a mis Primos y reconozco su amor.

A veces los primos pueden ser como los hermanos, más si nos criamos con la abuela que quizás también los cuidaba a ellos.

Y esa vivencia nos puede llevar a rivalidades. Quizás  de niño nos llegamos a sentir excluidos, o lo comparaban a ellos contigo, o había preferencia en el cariño de los adultos, o simplemente tú querías algo en un momento determinado y él o ella también y se lo daban a el/ella.

Así que aunque no lo creas hay que mirar a ese niño(a) para poder sanar lo que puede estar allí guardado.

Bueno en este día, la mirada es para ellos. Recordar lo que nos hicieron y lo que le hicimos, dejar de sentirnos víctimas o culpables por lo que haya pasado es un gran avance para nuestra liberación personal y espiritual.

Hay dos roles que constantemente estamos representando, el de víctima y victimario o perpetrador.

Y aunque parezca mentira, así llevamos la vida unas veces en un rol, otras veces en el otro. Pero para que exista uno, debe existir el otro.

En estos roles hay un papel principal que los acompaña, el de la culpa y el victimismo.

Si estamos en el rol de víctimas, estamos poniendo en el otro la responsabilidad de todo lo que nos pasa, no asumimos nuestra responsabilidad que también tenemos.

Todo está en 50/50,  ambos son responsables de las vivencias y de las heridas.

El perdón no se da entre víctimas, ni verdugos: el perdón se da a alguien a quien no ponemos por encima, ni por debajo, sino al mismo nivel que nosotros. Una persona que está sufriendo y además adjudica la responsabilidad de este sufrimiento a otros, difícilmente estará en una posición de perdonar en este punto de su vida.

Actividades.

Toma una hoja y traza 3 columnas, en una vas a poner el nombre de tu primo con quieres hacer el trabajo del perdón, en la otra lo que te hizo y en la 3era lo que tú le hiciste.

Luego le vas a escribir una carta donde le dices como te sentiste con lo que paso entre uds, que lo perdonas. Y si tú le hiciste algo, también lo escribes pidiendo perdón.

Por otro lado vas a hacer un dibujo donde estás tú y todos tus primos, celebrando en familia, disfrutando. Este dibujo lo vas hacer después de que realices la meditación.

Recuerda si lo deseas enviarnos tus dibujos para todos aprender también de tu experiencia.

Meditación

Siéntate en tu lugar sagrado

Toma un minuto para escuchar como suenan los latidos de tu corazón, ahora piensa en todos tus primos. Durante un minuto mira sus caras y sus rostros, ahora imagina como suenan los latidos del corazón de todos ellos y como a la final es un solo sonido tu corazón y el de todos tus primos

Ahora imagínate que viajas en el tiempo, desde que eres niño y recuerda lo que paso con ellos, y simplemente le das gracias por la oportunidad que tienes hoy de liberarte y liberarlos a través del perdón

Siente la gratitud de ellos al sentirse libres y al liberarte.

Haces este mismo encuentro desde tu adolescencia, y desde tu edad actual, es como si viajaras en tres tiempos, ya que no todos tus primos te hicieron algo en solo una etapa de tu vida.

Cuando termines de hacer la meditación, siente como todos se unen y se abrazan.

Después de esta meditación es que vas a realizar el dibujo.

Pensamiento

Una disculpa es un perfume encantador; puede transformar el momento

más torpe en un regalo lleno de gracia.

Margaret Lee Runbeck

Afirmación:

Ahora puedo ir al encuentro de mi familia, honrando su destino y mirando con amor su vida

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Mercedes H Navas RL

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