Día 32 - Expedición del Alma

Día 32. Mirando mis Diferentes Amores.

En este día nuestra irada está dirigida hacia los amores de adolescencia.

Para mis estos fueron los más intensos

Aquellos a los que ame, y los que me amaron y desprecie.

Recuerdo a un chico que se llamaba Pedro, era muy especial, y me escribía unas cartas bellísimas, pero a mí no me gustaba. Entonces le hacía unos desplantes horribles.

Así que para mí esta estación será no solo para perdonar sino también para pedir perdón.

No sé cuál será tu historia, pero es importante que recuerdes también el daño que a través del amor le hiciste a otros.

Ser herido por alguien, particularmente por una persona que tú quieres y en quien confías, puede causar enojo, tristeza, y confusión. Si piensas todo el tiempo en sucesos o situaciones que te hirieron, los rencores, los deseos de venganza y la hostilidad pueden enraizarse. Si permites que los sentimientos negativos sustituyan a los positivos, quizás encuentres que tu propia amargura o sentido de injusticia te abruman.

Algunas personas por naturaleza pueden perdonar más fácilmente que otras. Pero aunque seas una persona rencorosa, casi cualquiera puede aprender a perdonar más.

¿Cuáles son los efectos de tener rencor?

Si no perdonas, quizás tú:

·      Traigas enojo y amargura a cada relación y nueva experiencia

·      Estés tan enfocado en la mala experiencia que no puedes disfrutar del presente

·      Te deprimas, o te pongas ansioso

·      Sientes que tu vida no tiene ni sentido ni propósito, o que estás en conflicto con tus creencias espirituales

·      Pierdes una conectividad con otros que es valiosa y enriquecedora

Actividad:

Imagina una silla vacía  frente a ti, y allí vas a colocar a esa persona que te hizo daño. Exprésale todo lo que te venga a la mente y sientas. El hecho de expresar verbalmente las emociones, de ponerse frente a la persona que te hizo daño es transformador. Es  necesario darte permiso para expresar, protestar y manifestar la propia verdad, legitimar el dolor, el abandono, las humillaciones, y las consecuencias que esas experiencias tempranas han tenido en la propia existencia, es decir, los condicionamientos asociados a esas heridas: miedo a la vida, no sentirse merecedor, elegir parejas que no te aman, permitir el mal trato, adicciones etc. Al atreverte a cuestionar y “acusar”  a esa persona,  te ayuda a ponerte frente a tu  propia experiencia, y así te liberan de las emociones incrustadas en las células.

Luego que termines de decirle todo lo que sientas, vas a tomarte unos minutos y luego  te vas a colocar en la silla de la persona y vas a permitirte pensar que te diría. Deja que tu mente te de las respuestas o te diga las palabras que necesitas escuchar para sanar.

Cuando termines, te paras y te colocas en otro lugar, respiras lento y permítete sentir todo tu cuerpo

Escribe lo que paso en esta experiencia

Meditación:

Siéntate en un lugar sagrado que escojas en esta parte de la montaña.

Y te vas a imaginar a todas las parejas que tuviste durante tu adolescencia.

Aquellos que te hicieron daño, y los que les hiciste daño.

A cada uno de ellos le vas a entregar una flor, a los que te hicieron daño, le dices te perdono y a los que heriste le dices perdón.

Cada uno de ellos toma la flor y la colocan en su corazón.

En ese instante la flor se vuelve de color rosa y emana una energía de llenando todo el espacio de sanación para todos.

Respira ese momento y siente como el amor y la sanación se hace presente para ti y para ellos.

Pensamiento:

 “Amurallar el propio sufrimiento es arriesgarte a que te devore desde el interior”.

Frida Kalho:

Afirmación:

El poder mirar hacia el pasado y perdonar, me permite salir de la cueva donde el dolor me mantenía atrapado(a)

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Mercedes H Navas RL

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