Día 24 Expedición del Alma

Dia 4: Libero mis limitaciones y fluyo con el Éxito.

Liberando a mis hermanos

Las relaciones entre hermanos suelen ser las más largas de nuestras vidas, y de las más importantes, porque forjan las directrices de la personalidad de cada uno. De hecho, los estudios psicológicos certifican que el orden de nacimiento es una variable psicológica importante: no es lo mismo ser hijo único que ser el mayor, el mediano o el pequeño. Es más, en algunos casos, aun habiendo crecido en una misma familia, se desarrollan caracteres tan diferentes que no es extraño pensar que no parecen hermanos. El orden, en este caso, sí importa, pues favorece que individuos que comparten los mismos padres vivan distintas experiencias.

Los hermanos son, por lo general, las primeras relaciones que tenemos entre pares, lo que no quiere decir que tenemos la misma jerarquía, porque, incluso entre gemelos y mellizos, hay un hermano mayor y otro menor, y este orden hay que tenerlo  en cuenta.

Los hermanos compiten por el amor de los padres; es por ello que, es normal que surjan rivalidades. De hecho, se dice que los hermanos que no se pelean, no son hermanos.

Estos vínculos nos enseñan a convivir, a reconocer al otro, manejar las frustraciones, entre otras tantas cosas.

La relación que tuvimos y tenemos con nuestra familia muchas veces la vemos reflejada en nuestras dinámicas con nuestras parejas, hijos, en el trabajo, con nuestros amigos, etc.

Todos llevamos con nosotros nuestras dinámicas familiares, porque al nacer ocurre algo parecido a cuando nos invitan a una fiesta y vamos. Hay de todo allí y la podemos pasar de las mil maneras.

Un hecho común en las familias es que los hermanos mayores se vean más implicados en las dinámicas familiares que los que nacieron luego. Los hermanos menores se encuentran más liberados, por lo que les corresponde agradecer a sus hermanos mayores por el simple, pero significativo hecho, de haber nacido primero.

El primero que planteó la teoría del orden del nacimiento en el ámbito científico fue el psicólogo austriaco Alfred Adler, uno de los primeros discípulos de Sigmund Freud, y su primer disidente. Según él, los hermanos mayores tienden a ser más conservadores, autoritarios, responsables, conformistas, , el respeto a las expectativas y los valores paternos y el perfeccionismo; el mediano, en terreno de nadie, tarda en decidir qué quiere hacer con su vida -frente al mayor, que la encarrila muy pronto- y desarrolla más relaciones con iguales que jerárquicas, suelen ser más independientes, críticos, cooperantes y creativos y el más pequeño, es el(la)  bohemio(a) y el riesgo; divertido y encantador, puede ser también más débil que los otros y los hijos únicos egocéntricos, dependientes e hiper protegidos.

La característica fundamental de la relación entre hermanos es su ambivalencia. Por un lado, puede representar apoyo mutuo y ser relevante en el desarrollo de la identidad; pero por otro puede ser competitiva y limitante, una relación que valora y a la vez crítica y en la que existe amor y odio.

Quizás en este día de la expedición, te resulte un poco duro este trabajo del Perdón.

Los conflictos con los hermanos son muy frecuentes, pero si ese conflicto hace que nos separemos, ya se habla de otra cosa.

Tus hermanos te dan toda la energía para el mundo material, si tienes conflicto con ellos, evalúa como esta esta área en tu vida.

Si fuiste hijo único, chequea que paso contigo, porque a lo mejor el no tener hermanos hizo que toda la mirada de tus padres estuviera encima de ti y sus niveles de exigencias eran más elevados.

Si tuviste muchos hermanos, a lo mejor no tienes capacidad de poner límites, porque cuando son muchos los límites no existen.

En mi caso es posible que mi hermana Chela, sea quien tuvo mayor conflicto porque yo me ponía su ropa y zapatos sin su permiso, jejej, es que ella compraba ropa muy linda.

Hoy en día es muy frecuente la separación de los hermanos por su preferencia política, cosa que no era muy fácil verlo antes.

Así que, en este nivel de Perdón, hay que poner muchas cosas de un lado, porque esas personas que tienen los mismos padres que tú, hay que sanarlos para la sobrevivencia del sistema.

¡Adelante!, da este gran paso para tu sanación.

Cada día, es un nuevo nivel de avance, quizás algunos te han movido más que otros, aquí lo importante es pasearse por cada situación y buscar dentro del corazón la herida que pudiste haber tenido.

¿Como ha sido desde tu infancia tu relación con tus hermanos?

¿Con cual tuviste más o menos conflicto?

¿Cuál es tu lugar en la hermandad?

¿Tuvo tu mama abortos o perdidas?

Esto es importante para que puedas ubicarte en el lugar que te corresponde.

A lo mejor crees que eres el hijo Nº 2, y resulta que tu mama tuvo dos abortos antes que tú, lo que te lleva a ubicarte en el lugar Nº 3.

Cada puesto que tengas en la jerarquía tiene una función específica dentro del sistema.

Aquí te comparto un poco sobre esa jerarquía, según la metagenealogía,  para que observes porque tú y tus hermanos son como son, jajaja

EL PRIMOGÉNITO intenta conquistar el mundo, mira al padre

Cuando llegan al mundo se convierten en los reyes de la casa. Sus padres, aun principiantes, tienden a sobreprotegerlos, a perdonarlos con facilidad, crecen con la sensación de ser el centro de atención, así que se podría decir que llevan el liderazgo en la sangre.

Son centrados y perseverantes y, según las estadísticas, son los hermanos mayores quienes llegan a CEO, Senador o Astronauta y suelen ganar más que sus hermanos pequeños.

Cuando ostentan un cargo de liderazgo, suelen llevar las riendas con cautela, basándose en mecanismos clásicos y asegurando cada paso.

EL SEGUNDO intenta vivir en armonía con el mundo, mira a la madre

Hablar de los medianos en general es complicado, puesto que en una familia puede haber uno o varios a los que englobar en esta categoría. Algunos adoptan una posición más cercana al hermano mayor, mientras que otros se mueven hacia el lado contrario.

Su comportamiento es una mezcla de ambos extremos, y se caracterizan precisamente por eso: por no tener un rol demasiado definido. Como consecuencia, de no ser ni “el primero” ni “el último” en llegar a casa, tienden a tener mayores problemas de autoestima, a pasar más desapercibidos y a ser más introvertidos. Sin embargo, también son más observadores y más independientes.

En lo profesional, los hermanos medianos son -por lo general- más indecisos, lo que les suele llevar más tiempo para dar con su verdadera vocación y el ámbito en el que desarrollar su talento. Por otro lado, el hecho de haber crecido a la sombra de hermanos que se han llevado la mayor parte de la atención, también los hace más resilientes y especialmente hábiles para las relaciones comerciales, la comunicación y y el networking.

EL TERCERO se inclina a eludir el contacto con el mundo, no sabe a quién mirar, si al padre o a la madre

Suelen no estar de acuerdo con el orden establecido, especialmente en aquello de ser el último eslabón de la cadena,  lo que les obliga a contrarrestar su debilidad con un carácter más fuerte, con cierta rebeldía. Son carismáticos y un tanto más salvajes que sus antecesores.

Los progenitores, que ya conocen el oficio de la paternidad, se muestran más tranquilos ante su educación y ante el contacto de su hijo con el mundo. Eso les convierte en personas más intuitivas que sus hermanos mayores; también más divertidos, en ocasiones más dulces. La fuerza no les no sirve, así que desarrollan cierta perspicacia para ganar, al menos, en las batallas dialécticas o llamar la atención por cuestiones más allá de su tamaño.

Tienden a escuchar más a las personas e intentan conocer sus deseos o intenciones para poder ir un paso por delante. En el entorno profesional son más arriesgados y más creativos; muchos escritores, artistas o cómicos son los pequeños de la familia.

El cuarto, quinto y sexto hijos repiten las tendencias del primero, segundo y tercer hijo. Lo mismo para los siguientes.

Actividad.

Busca y toma tu lugar en el sistema

Aquí la invitación es que busques cuál es tu lugar en la jerarquía, esto es tomando en cuenta los hijos de papa y mama juntos.

Si tus padres tuvieron otros hijos, haz el orden por cada progenitor.

Te pongo un ejemplo:

En mi caso yo soy la primera de mi papa y mama, pero papa tenia un hijo antes con otra señora y mama tuvo dos hijos antes con otro señor, por lo que yo soy la 2da por parte de papa, la 3era por parte de mi mama y la primera entre ellos dos, o sea que tengo del primer hijo, del 2do y del tercero, con razón soy como soy, jajajaja.

Chequea entonces como es tu personalidad de acuerdo a la información suministrada, y si no estas tomando tu lugar, chequea hasta que punto eso te está creando problema

Por otro lado, te invito a que redactes un cuento, o una historia, donde vas a crear personajes que representen a tu niñez y a cada uno de tus hermanos (si no tienes hermanos hazlo con tus compañeros de trabajo, amigos, etc), describiendo en ese cuento, todos los acontecimientos que has vivido y que sientes te hicieron daño, lo interesante de esta actividad es que vas a ir incluyendo dibujos de lo que estés desarrollando.

En ese escrito cada uno de ellos tendrá un nombre y un personaje, deja que tu imaginación te lleve a expresar todo lo que has guardado y que es hora de sacar adelante.

Meditación.

Ve a tu lugar sagrado y visualiza un fuego en ese lugar.

Siéntate cómodo y comienza a realizar tus respiraciones lentas y profunda, conectando con tu corazón

Piensa en todos esos personajes que has escrito y ahora a ese personaje que imaginaste, ponle el rostro de tu hermano.

Deja que cada uno de esos personajes te acompañen allí junto al fuego.

Ahora tu solo vas a escuchar

Cada uno de tus personajes, también tiene su propia historia y ahora ellos te lo van a contar alrededor del fuego

Vas a imaginar como las palabras de dolor que ellos pronuncien, se convierte en un símbolo que va directamente al fuego.

En la medida que ellos cuentan su propia historia, esas situaciones que vivieron se transforman en un símbolo y se sana con el fuego.

Escucha la historia de tus hermanos, seguro te darás cuenta que en el fondo es la misma herida percibida de diferentes modos.

Tomate el tiempo necesario para escuchar, entender, perdonar y ser perdonado.

Recuerda en toda relación hay un 50-50 de responsabilidad, la tuya y la del otro.

Cuando sientas que ya todo está dicho, quédate con la presencia de cada uno de tus hermanos, ya sin la representación de su personaje, simplemente siendo ellos mismos.

Cuando sientas que ya deseas terminar la actividad, simplemente respira profundo y abre tus ojos, mueve un poco tu cuerpo para soltar el exceso de energía que puedas tener por lo vivido.

Pensamiento

El perdón es una decisión, no un sentimiento, porque cuando perdonamos no sentimos más la ofensa, no sentimos más rencor. Perdona, que perdonando tendrás en paz tu Alma y la tendrá el que te ofendió. 

(Madre Teresa de Calcuta)

Afirmación

En cada paso que doy a través del Perdón, puedo ir más ligero a la vida

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